sábado, 27 de marzo de 2010

NO CON TU FUERZA SINO CON EL ESPIRITU!

El enemigo quiere que usted y yo creamos que podemos comprar la gracia de Dios. La gracia de Dios no esta en venta, pues su misma definición es favor inmerecido, lo cual indica que es un regalo. La gracia no se puede comprar con oración, lectura bíblica o las ofrendas. Ni siquiera se puede comprar con buenas obras. No se puede comprar leyendo, memorizando las escrituras. Pues esta no se compra porque solo se recibe. Después de muchos anos de lucha como miembro de la iglesia, Dios me revelo que no es por la fuerza humana que debo vivir, sino por el Espíritu del Señor. Mi vida cristiana y el ministerio que Dios me ha dado para alcanzar a otros mediante la palabra y la escritura, no depende de mis esfuerzos, sino de la presencia y el poder de Aquel que vive su vida y obra a través de mi y la gloria se la debo toda a El. En mi caso tuve que aprender la lección hacen 19 anos, pues muchas veces en nuestro celo por servir al Señor hacemos mucho, descuidando la mayor y mejor parte, la de estar a los pies de Jesús bebiendo del agua de vida directamente de sus manos. Hay que aprender que solo en la presencia del Señor es que recibimos su poder! No es asunto de tratar de hacer deberes o imitar lo que otros hacen tomando prestado del aceite de quienes tienen un poco extra. Es correr en busca del aceite uno mismo pasando tiempo en privado con Dios antes de hacer otras cosas o poner otras cosas en primer lugar. Tenga verdadera comunión con Dios para que sea estable mientras enfrenta los acontecimientos de la vida diaria y los que vendrán para el fin del tiempo, lo cual nos hará contemplar y ver que nuestra justicia es como trapo de inmundicia al compararla con la justicia del Todopoderoso. Como persona no merezco disfrutar de la unción del Espíritu Santo sobre mi vida, solo porque paso tiempo con el diariamente. Pues la gracia de Dios no se recibe por hacer cosas, o seguir un método, pero el sumergirnos en su palabra nos hará ver cuan grande es nuestra necesidad de su gracia infinita, reconociendo que necesitamos colirio y oro refinado para ver que la justicia de Dios es la única que puede cubrir nuestras faltas y hacernos aceptos delante de nuestro Padre Celestial. Que hermoso que podemos contar con Su justicia. Seamos agradecidos por su gracia tan sublime, tan abundante y que es mas que suficiente permitiéndonos disfrutar de la paz, el gozo y el reposo que nos da en Cristo Jesús! Que esta semana santa puedas meditar en cuan maravillosa es Su gracia y que te sostenga por siempre!

lunes, 22 de marzo de 2010

SENOR AYUDAME!!!

"Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo” Isaías 41.13
¡Señor ayúdame! ¿Cómo cambio mi condición? Esta es la pregunta que muchos se hacen en la era que vivimos. ¡Esto no es fácil por cuenta propia! Si queremos verdaderamente ser restaurados debemos permitir que Dios actué en nosotros lo cual puede actuar sin duda, pero Dios quiere que nosotros también aprendamos a creer y depender de que ese cambio que Dios va actuar en nosotros El lo puede hacer. Pero para que suceda tenemos que reconocer nuestra necesidad y para esto: Primero, debemos tratar con nosotros mismos: somos la parte más difícil del cambio, aunque tratemos de echarle la culpa a otros, el problema está en nosotros. No podemos buscar responsables de las cosas que nos pasan siempre. Es tiempo que también digamos bueno yo también soy responsable. Segundo, vivimos cómodamente en una vida de satisfacción propia, siendo el centro nosotros mismos de nuestro bienestar, igual que los bebes, si ellos tienen todo lo que necesitan están felices, en cuanto les falta algo se ponen a llorar. Así somos muchas veces y esto es como vivir en una isla donde somos el centro de todo y todo gira a nuestro alrededor. Por lo que es imposible tomar una actitud de sacrificio y dejar de lado algo que no nos hace bien. Tercero, menospreciamos todo lo que no sea según nuestro pensamiento y muchas veces no nos damos cuenta que nuestra mente está limitada a ver ya que los sentimientos y las circunstancias nos nublan los ojos. Esto incluye a Dios en quien sólo vamos a confiar cuando nada de lo nuestro funcione. ¿Quieres realmente ser restaurado? Sigue los 7 pasos para la restauración meditando sobre ellos y serás restaurado. Los alcohólicos anónimos tienen 12 pasos, si bien son muy útiles se diferencian de los nuestros en que nosotros nos sometemos enteramente a la obra del Espíritu Santo en todo y no a nuestro propio esfuerzo, esto es muy importante a la hora de tomarlos. Léelos detenidamente. No te apresures a pasar rápidamente de uno al otro, trata de entender lo que ellos significan. Finalmente medita claramente en los textos bíblicos que están al final de cada paso.
7 pasos hacia la restauración
Admito que no tengo la capacidad de afrontar mi problema solo y necesito dejar el señorío propio. Isaías 41.13, Salmo 40.2 – Mateo 5.3, 1 Samuel 2.9
Reconozco que solo el poder de Dios a través de Jesucristo puede enderezar mis pasos y hacerme una nueva criatura. Juan 10.10, Salmo 37.5 . Proverbios 3.5-6
Acepto la palabra de Dios como guía en todo aspecto mi vida, decido obedecerla incondicionalmente con la ayuda del Espíritu Santo obrando en mi vida. Salmo 119.105 Juan 17.17 Lucas 6:46
Realizaré un detallado y sincero inventario moral de mi vida para reconocer la naturaleza exacta de mis faltas y ofensas, tratando de reparar el daño causado.1 Juan 1.9
Comenzaré sin desesperarme aceptando la voluntad de Dios en todo, a dar pasos genuinos que me conduzcan a un cambio en mi comportamiento, carácter y forma de vida. Mateo 6.33, Efesios 4.22-25
Remplazaré los conceptos de la vida que me gobernaban antes, por el gobierno del Espiritu Santo y Su palabra en mi vida. Romanos 12.2-3 Efesios 2.2
Seré de testimonios a otros, para que así como yo he encontrado libertad y salvación en Cristo, otros también la encuentren. Hebreos 13.16
Que Dios restaurare tu camino y te de paz y seguridad en todo lugar!