jueves, 8 de octubre de 2009

LA COMPASION ES UN FRUTO DEL ESPIRITU

Por tanto, como escogidos de Dios, santos y amados, vestíos de profunda compasión, de benignidad, de humildad, de mansedumbre y de paciencia. Colosenses 3:12-15
Cuando las vidas estan tan ocupadas y agitadas, las personas tienden a enredarse tanto con sus propias preocupaciones que pierden el sentido de la compasión por los demás. Existe una necesidad de gran compación en este mundo. Pero la compación solo puede surgir a través de un alma que está en una armonia divína porque es fruto del Espíritu. Cuando no se está en armonia divina es dificil encontrar compación hacia otros.
En el mundo actual, hay muchos incidentes, muchas experiencias dificiles, muchas enfermedades, muchas crisis familiares, que invitan a que expandamos el don de la compación hacia todo lo que suceda a nuestro alrededor. Como hijos de Dios debemos llevar las manos a nuestro corazon y sentir dentro de cada celula de nuestro cuerpo, que somos hijos de Dios solo por el hecho de que El fue compasivo con nosotros, sin nosotros merecelo. Pues solo con la certeza de ese divino regalo, y lo que ahora somos en Cristo, no habra nada que pueda aplazar el regalarle a otros tambien compacion., pues si de gracia recibisteis, darás de gracia. Pero tristemente muchos no se ocupan porque en sus vidas tan ajetreadas no ha habido lugar para recibir la sabiduria compasiva que proviene de escuchar diariamente a Dios.
Debemos tomarnos el tiempo para observar y responder a las personas, a nuestro alrededor ya sean niños pequeños, padres o familia, hermanos en la fe o un animalito. En algún momento en medio de las demandas que tienes, tómate el tiempo de acariciar la mano de un anciano, de consolar a una madre cansada, o de hacer una llamada sin apuros a un amigo o hermano en la fe para que puedas dar el bálsamo compasivo que Dios espera que compartas con otros.
Marcos. 9:37 dice: El que recibe en mi nombre a un niño como este, me recibe a mí..

lunes, 5 de octubre de 2009

SEGUROS EN CRISTO

“Por lo cual asimismo padezco esto; pero no me avergüenzo, porque yo sé a quién he creído, y estoy seguro que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día.”2 Timoteo 1:12


Las inseguridades comienzan cuando dejo que mis emociones tomen el control y no la verdad de la Palabra de Dios. NO puedo estar segura en Dios… sino le conozco realmente. Pablo dice: “yo se en quien he creído y estoy seguro”. Cristo es nuestro fundamento sólido, inamovible. “Por lo cual también contiene la Escritura: He aquí, pongo en Sion la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa; Y el que creyere en él, no será avergonzado” 1 Pedro 2:6
En Cristo puedo estar:
  • Segura de mi salvación: Juan 10:27-29. Efesios 1:132.

  • Segura de mi destino eterno. 1Pe.1:3-43
  • Segura de ser su hija. Juan 1:124.

  • Segura de la confiabilidad de Su Palabra y Sus promesas. 2Pe.1:195.

  • Segura contra el ataque del enemigo. Efesios 6:11-176.

  • Segura del control de Dios. Lam.3:37

  • Segura de su provision y cuidado. Salmos 91:11, Salmos 119:50 Salmos 73:2

¿Tienes a Dios? Porque si le tienes, tienes todo el amor y la vida , toda la dulzura y la ternura- todo lo que puede satisfacer el corazón y deleitar la mente. Tener a Dios es tenerlo todo, aunque se esté despojado de todo. El ser destituido de Dios es ser despojado de todo, aunque se tenga todo. Hay tantas promesas, que nos ayudan a no mirar las dificultades que el enemigo pone en nuestro camino sino poder ver el poder y la fidelidad del que hizo la promesa. Confía segura en Sus Manos. Él es la Roca firme, el fundamento sólido de nuestra vida. Por esto lo alabare siempre!!!