sábado, 6 de septiembre de 2008

NOE Y EL ARCA

Un refrán muy antiguo dice:"No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". ¿Porque nos gusta procrastinar las cosas importantes para el día de manana? Cuantas ideas, metas o sueños pasan por nuestra mente que dejamos ir, sabiendo que hay un gran potencial en ellos. Aprendamos de del patriarca Noe. Noe tenía 600 años de edad cuando Dios le dijo que construyera el arca. Tuvo que salir del carril de la pereza y poner por obra la idea. El no rechazó la idea de hacer el arca. Comenzó a construir el arca junto a su familia y a la vista de todos sus vecinos.
Tuvo que soportar la burla de la gente que dudaba de todo lo que hizo. ¡Cuantas veces las miradas y las burlas de los cercanos detienen a muchos! Sin embargo el continuó. Porque su confianza estaba puesta en Dios y no en los hombres, conociendo que Dios nunca falla. Y así mismo fue, el diluvio vino y terminó. Noe pudo disfrutar por haberse arriesgado a confiar en una promesa del Señor. Nosotros tambien podemos ser diligentes y honrar a Dios con nuestro trabajo. Arrieguemonos por medio de los servicios que damos a otras personas ya sea como maestro, picólogos, médicos, llevemos a otros el agua de vida que tanto necesitan para saciar su necesidad. Si el maestro ofrece instrucción, puede darle a sus alumnos la mejor enseñanza superior de todas que es Jesús. Si el psicólogo ofrece terapias para sanar el dolor emocional de muchas personas, puede ofrecer la solución para sanar ese corazón quebrantado, quien es Jesús. Si el médico ofrece tratamiento para sanarlas las dolencias físicas, puede utilizar ese canal para hablarles a sus pacientes sobre la sanidad que Jesus trae a nuestras vidas mediante el bálsamo de su palabra. Todo esto podemos hacer porque Dios no nos ha dado espiritu de temor sino de poder, ademas de autoridad para pisotear serpientes y escorpiones que se interpongan en medio nuestro!!!


lunes, 1 de septiembre de 2008

NO HAY PORQUE DESESPERAR

Todos los milagros que registra la Biblia empezaron con un problema. Por eso si usted tiene un problema, no se desespere. Porque esto quiere decir que usted es candidato a recibir un milagro de Dios. Pero tiene que extender la mano y tomarlo. Dios hace lo imposible pero quiere que nosotros hagamos lo posible. Un buen ejemplo de esto lo tenemos en Juan 9:1 Cuando Jesús se encontró con un ciego de nacimiento, al cual le unto lodo en los ojos y lo mandó a lavarse en el estanque de Siloé. A lo mejor podríamos pensar: ¿Porque no le dijo solamente que fuera sano y ya? ¿O porque no dijo a sus discípulos que guiaran a aquel ciego hasta el estanque? Jesús tenía poder y autoridad para hacer cualquiera de estas cosas, pero no lo hizo así porque el quería enseñarles tanto a ellos como a nosotros que tenemos que extender la mano y tomar los milagros. Aquel hombre lo hizo: creyó a Jesús, fue se lavo con el agua del estanque y regresó con la vista sana. Pudiendo ver. Y Dios quiere que nosotros también demos ese paso haciendo nuestra parte. Y nuestra parte es que usted extienda sus manos y aplique en sus ojos espirituales el agua de vida de su palabra. Cuando usted haga esto que es confiar plenamente en los meritos de Cristo a su favor y en su palabra viva, entonces usted podrá flotar por encima de las situaciones difíciles y elevarse como el águila. Haga esto y yo le prometo anticipadamente el triunfo.