domingo, 29 de julio de 2007

FE PROBADA CON FUEGO


¿Cómo puede Dios producir oro del fuego de nuestras tribulaciones? En el momento no podemos ver mas allá de nuestras circunstancias. Quizá hayas tenido un plan trazado para tu vida, y ahora te das cuenta que ese plan tiene que morir al tu ceder a la estrategia oculta de Dios. Sin embargo puedes encontrar que el amor y la fidelidad de Dios te pueden mantener firme a pesar de tus desilusiones. Personalmente sé en lo mas profundo de mi corazón que Dios tiene un plan maravilloso para nuestras vidas, mucho mejor que nuestro propio plan. Proverbios 3:5 es una promesa la cual debemos internalizar: “Confía en el Señor con todo tu corazón y no te apoyes en tu propio entendimiento”. Debemos aprender a confiar en Dios en el transcurso de nuestras vidas reconociendo que si nos apoyamos en nuestro propio entendimiento, la vida se hace abrumadora. Podemos ser probados con circunstancias tan calientes como el fuego, como lo fueron los amigos de Daniel, Sadrac, Mesach y Abednego. Estos fueron echados a un horno de fuego que el Rey mando a calentar siete veces más de lo normal. Sin embargo estos se mantuvieron intactos en medio del horno. Cuando el Rey miró dentro del horno vió cuatro hombres en lugar de tres. ¡Este era Jesús, quien se paseaba en medio de ellos! Estos hombres salieron del horno sin siquiera oler a fuego, y sin las ataduras con que habían entrado. Estaban libres en medio del fuego porque Jesús los liberó de la destrucción del fuego y las ataduras. El también puede liberarte de las ataduras, para que en medio de las circunstancias que estes atravesando, con tu confianza puesta en Él, puedas sentirte libre en tu interior. Él, nunca nos deja. ¡El no lo hará! Él dice que es fiel para completar la buena obra que ha comenzado en nuestras vidas, a Su manera y en Su tiempo. Lo importante es dejarnos fluir con Su plan, aunque no lo entendamos en el momento ni tengamos la menor idea de lo que es, porque realmente Dios es fiel, y podemos confiar plenamente en Él. “Para que sometida a prueba vuestra fe, mucho mas preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo.” 1 Pedro 1:7 Tomado del libro, Refrescandonos en Su Presencia, autora Nilda Vazquez

No hay comentarios: